Se entremezclan sonidos, colores, santos paganos y de los otros; se superponen sabores, palabras, una canción urgente que da fuerza y apacigüa.
El chispeante sonido del aceite sobre el fuego, las risas de los vecinos que juegan al dominó en la vereda hasta que oscurece:
Las calles de tierra, las calles de asfalto.
Las escolas, los repiques, el zurdo y el bandoneón.
Los corridos, la cumbia, la samba, la milonga y el choro…
Desde Tijuana a Tierra del Fuego,
Latinoamérica es una pero es muchas.
Santa Dominga de los Buenos Ayres – Ciclo Latinoamericano de Arte
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